Para el abogado Quintana, las “muletillas” “el mal lo tiene de antes”, “la patología no tiene que ver con el trabajo” y “la lesión que se denuncia no genera incapacidad”, sumadas a la falta de prevención, provoca un aumento en la cantidad de juicios laborales
El dr. Juan Carlos Quintana, experto en derecho laboralista se refirió al informe elaborado y dado a conocer por la Unión de Aseguradoras de Riesgos del Trabajo (UART) que señala que durante octubre la litigiosidad por riesgos de trabajo tuvo un alza la provincia de Buenos Aires mientras que se dio lo contrario en el resto del país incluyendo a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
De acuerdo con el trabajo, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) registró una caída en la cantidad de demandas iniciadas por accidentes de trabajo que los especialistas señalan que se debe a que dicho distrito se ha adherido a la nueva ley de ART.
Como la provincia de Buenos Aires aún no ha seguido los pasos de Capital Federal, muchos de los litigios se mudan a territorio bonaerense de modo que quien demanda pueda verse beneficiado por la antigua ley lo que se traduce en no pasar por comisiones médicas para verificar el daño o grado de incapacidad planteado por el trabajador.
Este recurso, que en la jerga ya ha sido rotulado como la “Industria del juicio” ha sido fuertemente criticado por distintos especialistas que postulan que por la no adhesión a la ley se están disparando la cantidad de juicios y montos que beneficiaban a abogados, peritos y otros actores involucrados mientras que el trabajador apenas recibe migajas”.
A contramano de este postulado el dr. Quintana señaló que no le consta que efectivamente haya tenido lugar el incremento que denuncia la Unión de Aseguradoras de Riesgos del Trabajo (UART) aunque destacó que en el caso de que haya existido una aumento en la cantidad de demandas se debe a distintas razones que se relacionan con mala atención.
Para el letrado las ART son fiscalizadas “muy por arriba” por la superintendencia, lo que provoca que se produzcan otras anomalías en el papel que deben desempeñar estas empresas. No nos olvidemos que las ART no sólo tienen a su cargo la cobertura del daño, si no la prevención, cosa que desatienden mucho”.
En esta línea sostuvo que las empresas de ART intentan reducir costos no sólo dejando de lado la promoción y puesta en marcha de planes que contemplen medidas de seguridad para los trabajadores, si no que además hacen importantes reducciones de gastos en tópicos como traslados, estudios y viáticos del paciente.
Según la mirada del letrado, estas falencias que denuncia sumadas a tres muletillas que suelen utilizar las ART, (decirle al trabajador que el mal lo tiene de antes, la patología no tiene que ver con el trabajo y la lesión que se denuncia no genera incapacidad), son las que terminan provocando que 3 de cada 10 demandas terminen en juicio laboral. Para Quintana, esta relación podría explicar el aumento de casos de litigios laborales en la Provincia que denuncia la UART.
Criticó además que se catalogue al ámbito de los juicios laborales como una industria del juicio. “Se menciona con ese nombre tan vacío y pueril que es la llamada industria del juicio para lo cual se necesitaría una mafia de jueces, peritos y abogados y no por la cantidad de juicios si no por que todos saldrían favorables aún sin existir incapacidad” manifestó en diálogo con JUSTICIA EN PRIMERA PERSONA .
Al respecto indicó que algunas decisiones adoptadas por los gobiernos tanto municipal como provincial en ciertas ocasiones terminan dando lugar a litigios pero nadie apunta al ejecutivo como una industria del juicio “¿Qué se podría decir de la provincia o de la Municipalidad cuando ejecuta deudas de servicio que también genera miles de juicio, por eso a nadie se le ha ocurrido decir que hay una industria del juicio?” se preguntó Quintana.